El proyecto de esta casa nace como consecuencia de dos fuertes condicionantes del lugar. Por un lado la configuración natural del terreno con una pendiente acusada y abundante vegetación, y por otro lado la búsqueda de la mejor orientación y vistas a la Sierra.
La vivienda se deja caer sobre el terreno, sin alterarlo y conservando al máximo el arbolado existente. Por ello se ubica en la parte Este de la parcela, que es la zona con menor vegetación y más elevada, de manera que además se consigan las mejores vistas.
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El volumen superior aloja los usos más públicos (cocina, comedor, salón…), el dormitorio principal y una zona de estar donde hacer la vida en familia. Bajo los mismos se encuentran la zona de servicio, la de invitados y los dormitorios de los niños con salida directa a la piscina y a la zona de la barbacoa.
Otro de los objetivos del proyecto fue conciliar la apertura de la vivienda a Oeste, donde están las vistas a la Sierra y la apertura a Sur, para captar el mejor soleamiento. Por ello, la casa se extiende longitudinalmente a Este, pero los volúmenes que lo configuran se asoman para captar la orientación Sur.
El proyecto se materializa de manera sencilla, mediante tres volúmenes rotundos con cubierta a dos aguas. De esta manera el esquema de circulación es de gran sencillez, otorgando gran comodidad al día a día de la vivienda.
Buscamos el contacto con el exterior desde todos los espacios de la casa, generando grandes aperturas de huecos que permiten la entrada de luz, grandes porches en los que disfrutar del buen tiempo y de fantásticas vistas desde cada estancia.
El interiorismo buscó generar un espacio cálido, en el que los protagonistas fueran los materiales nobles como la madera, la piedra y los tejidos naturales. Piezas cuidadosamente seleccionadas que tuvieran un carácter atemporal y acorde con la arquitectura de la construcción. Pretendíamos un amueblamiento muy cómodo y funcional que invite a compartir la casa con amigos y familiares.
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Arquitecta responsable: Ana Andrés. Colaboradores: Jorge Porto (arquitecto y grado en edificación), Miriam Arias (amueblamiento y decoración)
Fotografías: Belén Imaz