Finca en Extremadura
Enclavada en un privilegiado entorno de la provincia de Cáceres, el objetivo fue transformar un establo abandonado en una casa de campo familiar mediante la rehabilitación integral, coherente y respetuosa con el entorno. Este trabajo pretende mostrarse como una no intervención en el territorio que reconoce la preexistencia como una sabia posición del ser humano en la naturaleza.
«La buena arquitectura es atemporal, aquella que entiende el paso del tiempo y lo incorpora como un elemento más en el diseño, como una pátina de experiencia e historia.»
Premio A+ Architizer 2013 en la categoria Architecture+Sustainability.
Finalistas «Domus Restauro e Consenvazione» (Italia).
Finalistas «Domus Restauro e Consenvazione» (Italia).
Una sabia posición en la naturaleza
Tras analizar las tipologías del entorno de esta casa de campo, la orientación sur, la posición de la edificación al abrigo de la sierra de Gredos… se reconoció en esta arquitectura rural una pieza mucho más inteligente de lo que a simple vista pueda parecer. Es por esto, y por la bella naturaleza en la que se ubica, que la nueva casa de campo repite la volumetría y los materiales existentes, aprovechando la experiencia de la propia construcción original.
Ningún interior se priva de las vistas del lugar en el que se ubica ni de la sensación de una íntima conexión con la naturaleza.
Una casa de campo que se abre a la naturaleza
Se construye un gran espacio central para el salón y la cocina, alrededor del cual se ordenan las distintas piezas destinadas a habitaciones. Se trabajan materiales básicos: agua, hierro, cemento y la piedra existente; se aligera el interior sustituyendo los muros de carga por ligeros pilares metálicos. En el patio se construye una fuente donde, de manera natural, brota el agua de una roca contribuyendo a refrescar la vivienda en los meses más cálidos e introduciendo las sensaciones naturales en la estancia principal de la casa de campo. El espacio central se abre completamente norte-sur para potenciar las vistas al valle, lo que consigue eliminar los límites con el exterior.
De establo a casa de campo contemporánea
Sostenibilidad y respeto por el entorno
Aunque de manera natural la vivienda es térmicamente estable, se solucionaron los problemas derivados de la falta de suministros de electricidad y agua corriente mediante los sistemas de sostenibilidad que se aplican en ÁBATON en todos los proyectos: se diseñó un sistema de paneles solares con acumuladores que permite el suministro de energía en verano; se instalaron turbinas que aprovechan el cauce de dos arroyos que pasan por la finca y que nutren de corriente eléctrica a los acumuladores en invierno. Una de las terrazas de cultivo se convierte en alberca, piscina natural por la que corre el agua de manera constante y que sirve de riego para los pastos. Ningún interior se priva de las vistas del lugar en el que se ubica ni de la sensación de una íntima conexión con las sensaciones naturales.