El reciente proyecto Undermountain de O´Neill Rose Architects es un ejemplo estupendo de diseño integral a medida. Los clientes de este estudio neoyorquino con base en Brooklyn -una pareja de jubilados- deseaban sacar el máximo partido a su parcela, una pradera con una suave pendiente que termina en un estanque.
Situada en Sheffield (Massachusetts), los arquitectos se inspiraron en los graneros de la zona, que están construidos en madera sobre una base de piedra. Sin embargo, su sencillo esquema tradicional de una sola planta con tejado a dos aguas se alargó de manera deliberadamente exagerada, hasta conseguir una casa anclada en la colina por un extremo y suspendida en el vacío por el otro.
Este efecto de «flotar sobre el paisaje», unido a la abundancia de ventanas por toda la vivienda a distintos niveles, va a permitir que la pareja disfrute siempre de su inmersión en la naturaleza aun cuando comiencen a perder movilidad con los años. Desde cualquier lugar se puede contemplar el lago, el huerto o el bosque. Incluso se pensó en sus perros, para los que se dispusieron dos ventanas bajas.
Esta impresión de estar al aire libre se potencia en el extremo sobre la colina con un porche. Una gran chimenea central permite su uso en cualquier temporada, y el acristalamiento puede aislarse mediante paneles.
El revestimiento exterior en madera de ciprés oscurecida se replica a pequeña escala en la amplia sala de estar. Aquí, un vestidor y un pequeño aseo se ocultan bajo la apariencia de una cabaña, mientras que el centro es ocupado por una llamativa zona de bancos acabada en azul.
Fieles a su estilo, Devin O´Neill y Faith Rose materializaron unos interiores limpios y luminosos, diseñando ellos mismos parte del mobiliario y la iluminación, inspirada en elementos rurales.
Por su parte, el tejado metálico incorpora numerosas placas solares para asegurar el suministro de electricidad, calefacción y agua caliente. El prado circundante y los humedales se dejaron intactos, construyendo solamente un paso abierto bajo el centro de la casa para que circule el agua de lluvia hacia el estanque.
Fotografía Michael Moran