Los arquitectos de Katsutoshi Sasaki + Associates construyeron esta peculiar vivienda en una parcela de 3m de ancho en el barrio residencial de Aichi (Japón).
Para encajar el proyecto en una estrechísima parcela -3m de ancho x 21m de largo- las dos plantas de Imai House se extienden a lo largo de los 21 m de parcela. No había sitio para pasillos así que el interior se distribuyó como una secuencia simple de espacios, uno tras otro; se adaptaron las proporciones de cada espacio a las funciones a la que estaba destinado, por ello, el salón tiene una doble altura de 4,4m y el dormitorio infantil sólo alcanza el 1,3m de altura; del mismo modo, la luz de cada espacio se adaptó en función del número de personas destinadas a disfrutarla: la habitación individual tiene luz natural limitada frente al espacio común que disfruta de mucha más luminosidad. Equilibrar la escala y la luz confiere personalidad a un simple espacio.
La escalera de madera arranca desde el centro de la primera planta y un segundo grupo de escalones se organizan en angulo para acceder a la terraza de la azotea, recogida y ubicada sobre la fachada principal de la casa. Está cerrada por grandes paneles de vidrio que dejan entrar la luz natural y sirven de ventilación al salón. Debido a la falta de espacio para crear un jardín, los arquitectos añadieron un pequeño patio interior al final de la planta baja al que se accede a través de una puerta corredera.
El espacio entre el salón y el dormitorio principal es estrecho y sirve como cuarto de jugar de los niños. La zona de dormir se eleva sobre el suelo e incluye una variedad de ventanas cuadradas así como librerías a medida que crean la zona de trabajo a lo largo del muro apuesto. Según los arquitectos, los espacios podrían ser intercambiables ya que son neutrales: uno puede dormir, comer o relajarse en cualquier momento y en cualquiera de ellos.
Vista de la parcela antes de la construcción
Imágenes cortesía de Katsutoshi Sasaki + Associates